La Abuela Margarita charla con Don Petete |
Peleando con los intrusos, cabeza abajo, dispuesto al mordisco. |
Contando
historias de seres especiales
Vanesa
tuvo una infancia dura, ardua si las hay.
Con
Susana, su hermana menor, y su madre, María Isabel, remaron la
indiferencia y la miseria de la década menemista con el amor y la
entereza que tenían.
Las
niñas pasaron un tiempo en un hogar para niños huérfanos y
abandonados en Santa Elena, y allí aprendieron con mentes y cuerpos
ágiles las tareas sencillas cotidianas.
Dueña
y señora desde siempre de un corazón de oro, Vanesa confió
humildemente en Dios y en la Madre, y ellos, como siempre, responden
y respondieron.
Hubo
siempre destellos de amor y conciencia en sus vidas, que encendieron
hogueras de menta para refrescar y sanar su cuerpo y su alma. Algunas
personas las acompañamos en su crecimiento espiritual y emocional.
Hoy,
es referente comunitaria en una barriada marginada de La Paz. Vanesa
organiza una chocolatada para 15 niños con sus vecinas, $20 de
leche, infinito amor y una fortaleza preciosa.
Lleva
y trae información de sabiduría y construcción social de avanzadas
luminosas.
En
sus remansos de paz, recostada contra el marco de mi dormitorio,
Vanesa me cuenta con un don único y singular las pequeñas dichas de
su vida y su barrio.
Con
la sonrisa iluminada por la Luna, y el Sol que le da gestos
vehementes de fogata nocturna, Vanesa me relata con gestos vehementes
las hazañas de la Abuela Margarita, la abuela de su esposo, que es
la Mujer Sabia del lugar, y sus loritos.
Doña
Margarita tiene un loro y una lora....y han hecho su nido bajo la
enramada de tala...
Allí
pusieron sus huevos, y allí, la Señora Lora, los empolla con
dedicación y esmero. La Abuela observó que Juanita, la Señora
Lora, tiene el oviducto “peladito”, eso es porque está bien
clueca, dice la Abuela. Don Petete, el Señor Loro, cuida con celo de
Esposo Abnegado a su familia.
Al
lado del nido, hay una jaula con la puerta abierta, donde Doña
Margarita pone el agua y la comida.
Cuando
hay visitantes que Don Petete intuye molestos para su Señora Esposa,
el Loro comienza a hamacar y hamacar con fuerza la jaula....y la
jaula se balancea.....y el agua se vuelca....y moja a los
indeseados....y los indeseados se corren.....!!!
Saber
construir límites con amor y creatividad, se dice en Psicología
Transpersonal!!!
Don
Petete, cuenta Vanesa, se llena el buche de pan mojado, y lo
regurgita en la boca de Doña Juanita, amada y amante, madre y
hembra...nutrida y nutricia!!!
Estas
historias me contó Vanesa con su luz de Sirio esta mañana, mientras
hace un parate en la limpieza y el orden de mi hogar.
Las
imágenes que relato son las que Vanesa me cuenta. Cuarto grado
aprobado.
Universidad
de la Vida: Aprobada y dando Cátedra!!!
Ahora
iré a que reprogramen mi camarita fotográfica, y veré de hacer las
fotos y otros menesteres de mi camino de ciudadana paceña. Y sentiré
la fragancia de los frutitos del tala...
Esta
historia que cuento, es una de las historias de mi vida.
Donde
Vanesa cuenta otra historia, y Doña Margarita y Nelly me contarán
seguramente me contarán otras historias... de dolor , de amor, de
tristezas, de fe, de esperanzas y de cosechas.
Es
como una Mamushka Rusa, ven? Una historia adentro de la otra, adentro
de la otra, adentro de la otra, adentro de la otra...hasta lo
infinito...puro amor y conciencia de vida.